¿Buscas las mejores posturas para el sexo lésbico para animar tu vida amorosa? Entonces esta guía de la sexóloga clínica Rachel Sommer, Ph.D., te ayudará

¿Sabías que varios estudios han revelado una mayor tasa de orgasmos en las lesbianas en comparación con las mujeres heterosexuales? Bueno, como mujer lesbiana, no me sorprende lo más mínimo. Las hermanas estamos familiarizadas con nuestros cuerpos y sabemos cómo golpear ese clítoris de la manera correcta También tendemos a valorar más el placer de nuestra pareja que el nuestro propio.

Sin embargo, si eres nueva en el sexo lésbico o simplemente quieres darle más sabor a tu dormitorio, he recopilado una lista de mis 7 posiciones sexuales probadas y comprobadas para parejas de lesbianas. Estas posiciones han pasado por horas de pruebas en el dormitorio, y la mayoría tienen una puntuación de 10 en mi medidor de orgasmos (¡mi compañera Jessica puede dar fe de ello!)

Además, todas las posiciones sexuales para lesbianas vienen con fotos e ilustraciones para que sea fácil probarlas tú misma en el dormitorio.

¡Vamos a verlas!

1. El 69

La posición del sesenta y nueve es una de las mejores posiciones para las parejas de lesbianas y las mujeres bisexuales, ya que os dais placer mutuamente. No hay nada más excitante que oír a tu pareja gemir mientras tú recibes el mismo tipo de atención.

Además, esta postura lésbica se centra en la estimulación del clítoris, el centro del placer femenino. Mientras que la mayoría de los hombres creen que las mujeres pueden alcanzar el orgasmo sólo con la penetración, las mujeres sabemos que nuestro clítoris es la clave de la satisfacción sexual. Y la ciencia está de nuestra parte. Según descubrimientos recientes, las mujeres que llegan al orgasmo reciben cunnilingus con más frecuencia que las que raramente experimentan el clímax.

Así que, si buscas un clímax alucinante, asegúrate de probar la posición del sesenta y nueve.

Consejo profesional: Puedes mejorar la experiencia estimulando el ano del otro, también conocido como rimjob.

Cómo hacerla

  1. En esta posición, uno de los miembros de la pareja se tumba de espaldas.
  2. La otra pareja se coloca en dirección contraria y se coloca sobre el cuerpo de su pareja de forma que su vulva quede sobre la cara de ésta.
  3. La posición de rodillas es la más cómoda y te ayuda a evitar poner el peso del cuerpo sobre tu pareja.
  4. También puedes incorporar el juego anal; utiliza la lengua o los dedos para maximizar el placer.

2. Sentarse en la cara

La postura facial no sólo sirve para la estimulación del clítoris. También te permite probar las fantasías de juego de poder. En el juego de poder, uno es el dominante y el otro el sumiso. Por lo tanto, cuando estás arriba, estás en una posición de poder, y el único papel de tu pareja es complacerte.

Probar cosas nuevas es esencial para evitar que la relación se estanque. Según el educador sexual Tristan Taormino, incorporar variedad en el dormitorio mejora la conexión entre tú y tu pareja. Así que no tengas miedo de hablar de tus fantasías y permítete explorar.

Consejo profesional: Puedes animar las cosas con un poco de juego de roles. Por ejemplo, imagina que tu pareja es un alumno travieso al que hay que castigar. Y el castigo consiste en servirte a ti realizando un cunnilingus mientras escuchas tus palabras sucias.

Cómo hacerlo

  1. En esta posición, una pareja se acuesta de espaldas.
  2. La otra pareja se pone a horcajadas sobre la boca de la pareja para estimular el clítoris de la pareja de arriba.
  3. La pareja de abajo puede alcanzar y acariciar los pechos de la pareja de arriba.
  4. No te olvides de cambiar de sitio

3. Estilo perrito (con correa)

El perrito es una de las mejores posturas para el sexo entre chicas, especialmente si te gusta la penetración profunda. Además, tus manos están libres para estimular otras zonas erógenas de tu pareja. Por ejemplo, puedes frotar sus pezones o su clítoris. Te pedirá más Confía en mí.

¿Quieres pruebas? Un estudio reciente demostró que el 81,5% de las mujeres participantes consideraron que la estimulación de los pezones era crucial en la actividad sexual. Afirmaron que la excitación aumentaba y que la experiencia sexual era mejor en general. Al aumentar la excitación, aumenta la lubricación vaginal, por lo que es posible que no tengas que usar nada más para la penetración. ¡Voilà!

Además, otros estudios mostraron que cerca del 76% de los propietarios de vulvas hacen que la penetración sea más placentera al moverse de manera que el juguete roce su clítoris. También puedes estimular tú misma el clítoris de tu pareja.

Después de insertar el consolador con correa, comprueba con tu pareja que está bien con la profundidad y la velocidad. A continuación, pídele a tu pareja que pruebe la técnica de la inclinación, es decir, que ajuste la pelvis probando diferentes ángulos que permitan una penetración más placentera.

Cómo hacerlo

  1. Si vas a adoptar la posición de penetración, haz que tu pareja receptora se arrodille a cuatro patas.
  2. Ponte el strap-on y penetra a tu pareja por detrás.
  3. Esta posición es una de las más versátiles entre las lesbianas; puedes incorporar el juego de pezones, la penetración anal y el sexo oral.
  4. También puedes probar a utilizar consoladores de doble punta.

4. Misionero

A continuación, hablemos de la popular posición del misionero. Lo sé, lo sé. Algunos piensan que es aburrida. Pero escúchame antes de descartarla.

En mi opinión, el misionero es en realidad una posición muy versátil, especialmente para las parejas del mismo sexo. ¿Por qué? Bueno, aquí están mis cuatro razones principales:

  1. El misionero es una de mis posiciones orales favoritas. Me permite abrir bien las piernas de Jessica para que mi lengua entre profundamente. ¡Qué rico!
  2. También es una de las mejores posiciones con correa para las parejas de lesbianas. Y si compras un consolador curvado, esta posición permite que se frote celosamente contra el punto G de tu pareja.
  3. También tienes fácil acceso al ano de tu pareja, lo que te permite probar el sexo anal o el rim job (pero recuerda que pasar del ano a la vagina puede provocar una infección).
  4. Por último, es una buena posición para los juguetes sexuales. Así que, ¡compra un vibrador para animar las cosas!

Cómo hacerlo

  1. Si adoptas la posición del dador, pide a tu pareja que busque una posición cómoda para sentarse. Por ejemplo, haz que tu pareja se siente en el borde de la cama. O haz que tu pareja se acueste.
  2. Puede apoyarse en los antebrazos para conseguir una posición más cómoda. O tumbarse completamente de espaldas.

5. Masturbación mutua

La masturbación mutua es muy excitante e íntima, y os permite conocer mejor las necesidades del otro. No hay nada más sexy que saber cómo complacer a tu pareja y recibir el mismo trato.

Además, las sesiones de masturbación mutua pueden ser liberadoras, ya que el sexo lésbico va en contra de las normas sociales. La sociedad ha ignorado el placer femenino durante mucho tiempo, y el papel de la mujer en el contexto sexual se redujo a la reproducción o a satisfacer las necesidades del hombre.

Por eso, masturbarse con tu pareja te permite entregarte por completo al placer. Y reconocer tu sexualidad como algo que hay que celebrar por la simple razón de que es agradable.

Cómo hacerlo

  1. Esta posición deja espacio a la creatividad. Pero la forma más habitual es tumbarse de lado, uno frente al otro.
  2. Desde aquí, puedes dar placer a tu pareja con los dedos o empezar con la estimulación de los pezones.
  3. También puedes utilizar un consolador de doble punta para practicar sexo con penetración mutua.
  4. También puedes estimular a tu pareja con los dedos o incorporar juguetes sexuales al juego.

6. Spooning

El «spooning» no es sólo para el sexo con correa. Si eres el receptor, puedes relajarte y disfrutar de diferentes tipos de sensaciones. Por ejemplo, haz que tu pareja se acerque para estimular tus pezones o tu clítoris. Por otro lado, si eres la pareja que da, tus esfuerzos se verán recompensados con los gritos de placer de tu pareja. Elijas el lado que elijas, todos salimos ganando.

Además, la postura de la cuchara permite un acercamiento máximo. Cuando tu cuerpo se aprieta contra el de tu pareja, puedes abrazarla para que esto sea aún más íntimo debido a la liberación de la hormona de la oxitocina que facilita la creación de vínculos.

Aunque una de las principales razones por las que las lesbianas dicen tener sexo es para aliviar el deseo, la necesidad de conexión emocional es esencial. De hecho, la falta de cercanía emocional podría contribuir a la «muerte en la cama de las lesbianas», es decir, a la disminución de la actividad sexual. Estudios anteriores indican que una mayor satisfacción sexual está asociada a factores emocionales como la cercanía, y una mayor satisfacción sexual predice una mayor frecuencia.

Si quieres evitar el lecho de muerte y aumentar la conexión con tu pareja, asegúrate de incluir la posición de cuchara en tu sesión de amor.

Cómo hacerla

  1. En esta posición de sexo lésbico, uno de los miembros de la pareja es la cuchara grande y el otro es la cuchara pequeña.
  2. Haz que tu pareja se acueste de lado si eres la cuchara grande.
  3. Ponte un strap-on y túmbate detrás de tu pareja.
  4. Utiliza lubricante para facilitar la entrada.

7. La tijera (molienda)

La tijera puede ser lo primero que te venga a la mente cuando pienses en el sexo queer. Aunque pueda parecer una visión estereotipada de cómo debe ser el sexo entre dos mujeres, es muy utilizado por las mujeres que se acuestan con mujeres.

Por ejemplo, un estudio reciente demostró que el 90,8% de las participantes encuestadas probaron el scissoring genital con una pareja femenina. Además, el 99,8% de las mujeres admitió haber practicado el roce genital, que es precisamente en lo que consiste la tijera.

Esta posición es principalmente placentera debido a la estimulación directa del clítoris, pero puede incluir el roce con los muslos u otras partes del cuerpo. Mientras sea piel con piel y se sienta bien, lo estás haciendo bien. También recomiendo mantener el contacto visual para aumentar el placer.

Cómo hacerlo

  1. Siéntense, uno frente al otro.
  2. A continuación, una de las dueñas de la vagina coloca su pierna derecha (la de arriba) sobre la pierna izquierda de la otra y su pierna izquierda bajo la derecha de su compañera, de modo que los genitales se toquen.
  3. Como el roce implica la parte exterior de los genitales, asegúrate de utilizar lubricación para evitar las heridas por fricción.
  4. Aunque la variante más común incluye el roce de los genitales de la otra persona, esta posición no tiene por qué implicar que las zonas de la vulva y el pubis se toquen.

Conclusión

La clave para disfrutar de la vida sexual es la variedad. Aunque el sexo lésbico puede parecer restrictivo debido a que ambos miembros de la pareja tienen las mismas partes del cuerpo, abre la puerta a muchas posibilidades. Por ejemplo, las mujeres queer pueden incorporar un consolador de dos cabezas, el juego anal, el sexo oral y la estimulación directa del clítoris. Tu imaginación es el límite

No tengas miedo de explorar nuevas posturas sexuales y mezclar las cosas: haz que fluya la pasión; es la receta para un gran sexo queer.