Las chicas con sobrepeso se sienten acomplejadas por su cuerpo durante el sexo. Quieren probar todas las posturas sexuales pero sienten que están demasiado gordas. Quieren sentirse sexy pero no dejan de preocuparse por los rollitos de la barriga y la celulitis de los muslos. Es difícil estar en el momento si sigues teniendo estos pensamientos. No dejes que los medios de comunicación te engañen pensando que necesitas tener una complexión atlética para tener un sexo increíble.

Si eres un poco más corpulento, estamos aquí para decirte que cuando se trata de sexo, puedes ser sexy sea cual sea tu tamaño.

Lo sexy es una mentalidad. Si crees que eres sexy, te sentirás sexy. Tu peso no determina tu sensualidad, así que no dejes que te impida pasarlo bien en la cama. Prueba estas posturas sexuales para gorditas y deslízate bajo las sábanas con tu nueva confianza.

1. En caso de duda, haz el perrito

Vamos, que sabes que la postura del perrito va a estar presente. Es una posición sexual clásica que viene con un montón de comodidades. Que te cojan por detrás ya es caliente a su manera, pero para las mujeres que tienen miedo de que su barriga se interponga en el sexo, el estilo del perrito puede hacer que te sientas sexy de cojones. ¿Por qué? Porque no estás exponiendo aquello de lo que te sientes insegura. Es una posición sexual estupenda para las gorditas porque todo lo que ve tu pareja es tu lindo culito. Y en esta generación Kardashian, los culos gruesos y redondos son lo que está de moda. Así que si te sientes insegura por la grasa extra de tu trasero, no lo hagas. Es una cosa de belleza según los estándares de esta sociedad.

Cómo hacerlo

Estamos seguros de que ya tienes una idea de cómo hacer la posición del perrito. Pero si no la tienes, aquí tienes la guía rápida de cómo hacerla. Para la forma de la vieja escuela, sólo tienes que ponerte sobre las manos y las rodillas. Levanta las caderas y haz que tu pareja se coloque detrás de ti. Si has aprendido lo básico, ya puedes empezar. Pero si te cansas de hacer la misma posición, siempre puedes darle un toque más picante.

Cómo darle un toque especial

Intenta ponerte de pie y colocar una pierna a cada lado de la esquina de la cama o de la mesa. Inclínate sobre la mesa con las manos o los codos soportando tu peso. A continuación, tu pareja te penetra por detrás de la misma forma que en la clásica postura del perrito. También puedes llevar el sexo a lo perrito a tu sofá. Si tu sofá tiene un reposabrazos largo, es hora de darle un buen uso. Inclínate sobre él y abre las piernas. Es una posición muy erótica y facilita el sexo oral y la penetración. Además, el peso de tu cuerpo es soportado por el sofá, por lo que no tienes que preocuparte de que tu pareja se canse rápidamente.

Consejo: Para una penetración más intensa durante el estilo perrito, puedes utilizar un consolador en tu ano o vagina. O pídele a tu pareja que utilice vibradores en ti. La posición del perrito permite un acceso más fácil a los juguetes sexuales.

2. Móntalo como una Cowgirl

Sí, puedes estar encima. A pesar de lo que te han hecho creer, montar a tu pareja es en realidad una de las mejores posiciones sexuales para las chicas gorditas. No temas que puedas acabar aplastando a tu bae con tu peso. Las caderas son más fuertes de lo que crees. Esta posición sexual te permite tener el control, así que si eres una de esas chicas a las que les gusta tomar el mando, te va a encantar el dominio que el estilo perrito te da sobre tu pareja. Pero para que te resulte más fácil, te recomendamos que te pongas de rodillas en lugar de en cuclillas cuando te muevas e intentes llegar a ese delicioso punto.

Cómo hacerlo

Hay una forma típica de hacerlo. Simplemente dejas que tu pareja se tumbe de espaldas, y luego te pones a horcajadas colocando tus piernas a ambos lados de su cintura. Tus manos pueden estar en su pecho, en sus hombros, en la cabecera de la cama o en tus muslos, dependiendo de lo que te resulte más cómodo. Entonces te mueves, o mejor aún, rebotas sobre su polla y le follas hasta que grite un orgasmo. Esa es la clásica posición de vaquera, pero si quieres darle un giro, esto es lo que puedes hacer.

Cómo darle un toque especial

En lugar de estar de cara a tu pareja, dale la espalda y ponte a horcajadas con tus piernas a ambos lados de sus caderas, de la misma forma que en la posición original de la Vaquera. Una ventaja obvia que esta posición puede ofrecer a las chicas tímidas o nerviosas por su peso es que oculta el vientre y, en cambio, ofrece a tu hombre una vista de tu sexy espalda. Así se elimina la presión de rendimiento que sienten las chicas cuando son ellas las que están encima de su hombre. Dejas de preocuparte por tu aspecto y te centras en el momento. Puedes apretar o rebotar sobre su polla, inclinarte hacia delante o hacia atrás. Sea como sea, la posición de vaquera invertida es una forma segura de tener un sexo alucinante.

Consejo: Pon una almohada debajo de la espalda de tu pareja para apoyar sus caderas. Te servirá de palanca y también te dará un mejor ángulo cuando le estés machacando.

3. Cuchara que lleva a la bifurcación

El «spooning» es una posición de sexo perezoso en pareja. No es el tipo de postura que te conviene si quieres sexo duro. Es más bien una posición sexual para situaciones en las que tú y tu novio os habéis despertado en mitad de la noche y de repente os apetece, así que acercas a tu pareja hacia ti y lo hacéis allí mismo. Os abrazáis con fuerza y tenéis una sensación dulce y agradable en la boca del estómago. Además de ser una postura sexual lenta e íntima, el abrazo con cuchara también funciona bien para las mujeres con sobrepeso preocupadas por sus curvas. Es una posición sexual dulce y romántica para las gorditas, porque si eres la cuchara pequeña, consigues ocultar tu estómago a tu pareja.

Cómo hacerla

Los pasos para la posición sexual de la cuchara son bastante fáciles. Esta es la forma básica de hacerlo. Mirando en la misma dirección, tú y tu pareja tenéis que tumbaros de lado. Tu pareja es la gran cuchara y tú te apoyas en su pecho. Entonces él te penetra por detrás. Puedes ayudarle a tener una entrada más fácil moviendo tu pierna superior un poco hacia delante. Para mantener la relación de piel, deja que tu pareja te rodee con sus brazos. Puedes experimentar con la posición de la Cuchara empujando hacia atrás contra el pecho de tu pareja mientras él empuja dentro de ti. Prueba a levantar las piernas hacia el estómago para conseguir un nuevo ángulo y experimentar una nueva sensación.

Cómo darle más sabor

Para añadir un poco de estilo a la postura sexual de la Cuchara, aquí tienes unos cuantos ajustes que puedes hacer. Sólo tienes que seguir los fundamentos de la posición de la Cuchara, y luego apretar las piernas con firmeza. Muévete un poco en un ángulo que permita que tu pelvis tenga más contacto con el pene de tu pareja. Coge la mano de tu pareja y llénala de lubricante, preferiblemente a base de agua para que sea resbaladizo y también más duradero para no tener que volver a aplicarlo. Él puede presionar su mano lubricada entre tus piernas y frotar tu vulva mientras sigue metiendo y sacando. Otra forma de cambiar la posición de Spooning es hacer la posición básica y luego enroscarse. Es casi como la posición del perrito, pero en lugar de estar a cuatro patas, te tumbas en la cama sobre un lado.

Consejo: Si quieres la intimidad que ofrece la postura de la cuchara, pero la quieres rápida y explosiva, sigue la posición básica de la cuchara y levanta la pierna del lado de tu cuerpo que no está tumbado en la cama. Engancha tu pierna en las caderas de tu pareja. Él puede apoyarse con el codo y agarrar tu muslo para poder hacer embestidas más profundas y potentes.

4 Levantarla pierna de tu pareja

Esta es una posición sexual que puede hacerte sentir reaaaalmente bien si la haces bien. Eso sí, tienes que ser flexible para conseguirlo. Algunos la llaman la posición sexual del «deslizador de piernas» por la forma en que tienes que levantar una pierna en el aire. No, no va a ocultar tu estómago, pero a las chicas gorditas les va a encantar por la forma en que el «Leg Glider» permite una penetración profunda e incluso la estimulación del punto G. También está esa intimidad compartida de mirarse a los ojos.

Cómo hacerlo

El Leg Glider es, sin duda, un poco más complicado que la mayoría de las posiciones sexuales porque requiere flexibilidad por tu parte. Pero con nuestra guía vamos a conseguir que sea lo menos dolorosa posible y sólo una experiencia llena de placer para ti y tu pareja.

Para empezar, tienes que tumbarte de un lado, ya sea el izquierdo o el derecho. Para mayor comodidad, digamos que te apoyas en tu lado derecho. Ahora, vas a utilizar el lado derecho de tu cuerpo para soportar tu peso mientras levantas la pierna izquierda. Levanta la pierna izquierda hacia el techo. Utiliza el lado izquierdo de tu cuerpo si necesitas estabilizarte. Tu compañero se coloca hacia ti arrodillándose pero permaneciendo erguido. Tiene que sentarse a horcajadas sobre tu pierna derecha y luego apoyar tu pierna izquierda. Después, todo es diversión y juego. En esta posición, él puede empujar tan fuerte, tan profundo y tan rápido como quiera.

Cómo darle más sabor

Hay una variante interesante del deslizamiento de piernas. Es así. Te tumbas de espaldas, levantas las dos piernas y las diriges hacia el techo. Tu pareja se arrodilla hacia ti mientras está de pie. Se introduce en ti y luego cruzas lentamente las piernas. Asegúrate de mantener las piernas lo más rectas posible. Puedes tocarte los pechos mientras él te penetra para darle un espectáculo y también para darte placer a ti misma. A los dos os va a encantar esta posición porque al cruzar las piernas se estrecha la entrada, lo que os da a ti y a tu pareja una sensación más estrecha. También es perfecta si eres un poco sumisa. El chico puede agarrarte las piernas y acercarte hacia él para poder tomarte con más fuerza.

Pro-tip: Deja que tu pareja te acaricie las piernas y los tobillos mientras haces esta posición. También puede jugar con tu clítoris para mayor diversión.

Conclusión

El cuerpo de una mujer es una obra de arte, no importa el tamaño. Realmente no hay razón para que te sientas avergonzada por esos rollitos de más que tienes durante el sexo. En todo caso, sólo aumentan la diversión. Se supone que el sexo debe ser agradable, pero el mejor sexo es aquel en el que puedes reírte y jugar mientras los dos os ponéis cachondos. Así que relájate, no te compliques y empieza a experimentar con estas posturas sexuales para gorditas.